viernes, 24 de julio de 2009

Fuego en 5ta avenida...

viernes, 24 de julio de 2009

Vaya, varios días sin escribir nada… Vamos por partes.


El domingo tuvimos celebramos la Eucaristía semanal, la misa de la comunidad. Con motivo del verano, sobre todo por el calor tan intenso, se nota que participa menos gente. Hasta el coro está perjudicado por esta circunstancia. Asistieron unas 150-200 personas, bien pocas en relación a las que suelen participar cada domingo durante el año. Aún así hacemos todo con la misma solemnidad de siempre. Aquí la brevedad no es una virtud…: Entrada solemne, con procesión, un lector para cada lectura y monición; el salmo, cantado; presentación de las ofrendas… etc.

Y al finalizar, unos cuantos avisos: el próximo domingo es la fiesta de Santa Ana (de gran importancia en esta iglesia), también habrá confirmaciones el domingo (casi 30 jóvenes, y no tan jóvenes).

Y para terminar todo… cantaron el “felicidades, Jesús, en tu día…” (nuestro “cumpleaños feliz”).

Por la tarde tuvimos misa a las 17’00h. Asiste poca gente, fundamentalmente extranjeros que viven aquí, diplomáticos, algún turista, etc.


Y para terminar el día una sencilla merienda con unos cuantos amigos e invitados. Las bebidas que habíamos comprado el otro día, algunas cosa para picar y unos dulces caseros bien ricos… Y sobre todo, un buen grupo de amigos y amigas.


Comenzamos con una breve oración y un sencillo recuerdo para el P. Mariano, recientemente fallecido. Resulta que el origen de este grupo de amigos que se reunían esta tarde, está en los cursos que organizaba el P. Mariano, junto con el P. Luís, y algún otro sacerdote más. Ellos fueron los primeros alumnos de lo que después se ha convertido en el Instituto Feliz Varela, una buena escuela de formación, diálogo y reflexión, para laicos en torno a los temas de teología y vida cristiana. Una sencilla despedida para aquél que ayudó a animar la fe y vida cristiana de esta gente y muchos otros más. Nos informó el P. Luís de los últimos datos que se han conocido: las últimas palabras, confesado y declarado por su asesino, del P. Mariano, fueron: “Te perdono”.


El resto de la tarde dio para mucho, sobre todo para mucha charla y diálogo, en un ambiente muy agradable y familiar. Algunos obsequios (celebrábamos dos cumpleaños) muy sencillos, pero valiosos por el esfuerzo que se requiere para conseguirlos.


La tarde terminó en torno a la televisión: daban imágenes del ballet que habíamos visto días atrás… discusión y teorías para todos los gustos… lo bueno es que no tenía que ganar ni perder nadie…


Pequeñas cosas de estos días.


Estuve charlando con una señora, enferma, y agobiada porque sus hijos, en sus intentos de ayudarla, la habían llevado a hacer ritos de santería, y ella, que es católica, por no contrariarlos… todo un drama de “idolatría” para ella…


Otra charla, con una chica de unos 20 años de edad, no creo que más. En su casa hay dos religiones: la católica y la africana (la santería, el sincretismo). Ella está bautizada, como todos en su casa. Y ahora quería saber cómo ir regresando a la comunidad cristiana, porque ella quiere, cuando sea, casarse por la Iglesia, porque esa sí es una boda seria, para toda la vida; porque ella no va a casarse de otra forma… si no es para toda la vida…

Por lo que ella misma contaba, ya con su juventud, tenía buen conocimiento y experiencia de la vida… Tenía bien clara la teoría sobre que el matrimonio ha de ser para toda la vida… pero lo que no está tan claro si será capaz de soportarlo… La emplacé a hablar con el P. Gregorio, a ver si poco a poco va “aclarando sus ideas y centrando su vida”, en palabras de ella misma.


Otra chica, única de su familia que venía a la Iglesia, de pequeña, tomó la comunión (“hizo la primera comunión”), contra la opinión de toda su familia, que no quería saber nada de la religión… y poco a poco fue acercando a su familia a la Iglesia… con el paso del tiempo, ella ha crecido, su familia, papá y mamá y hermanitos, siguen participando en la comunidad, aquí en Jesús de Miramar, y ella es la que se ha ido alejando… y la comunidad que ve ahora no le gusta nada… Estuvimos charlando un poco, lloramos un poco, también, y es posible, que para el próximo curso retome, poco a poco, su vida cristiana…

Esta mañana, antes de la misa, en el tiempo que dedicamos a confesiones, etc. se acercó una viejita, casi ciega… a pedir… Yo ya sabía que ella y su esposo, también ciego, ya están atendidos por Cáritas. Enseguida vino una de las abuelas de la comunidad, digamos que Yailén (retomo los nombres tomados del Granma) a avisarme de todo eso: “No debe usted darle nada, que ya nosotros, por medio de Cáritas, los estamos ayudando, y están bien atendidos”.


Jueves, 23 de julio de 2009.


Esta mañana amanecimos con un incendio justo enfrente. Gracias a Dios es un sitio de oficinas, donde no vive nadie. Es la central de Artex, la “empresa” estatal que se encarga de los artistas… todo lo que ellos hacen, se coordina desde aquí, o por lo menos, desde esta empresa (seguro que tienen más oficinas…). Se entiende los artistas que están dentro del circuito “oficial”, los que pueden salir a otros países y tener allí actuaciones, etc. Total, que amanecimos con unos cuantos camiones de bomberos y ambulancias, y coches de policía, y “caballitos” (así es como conocen aquí a los motoristas de tránsito –tráfico- que llevan motos bastante bonitas, muy llamativas, las buenas eran Harley Davidson, las de ahora creo que son Honda, y ellos llevan un uniforme siempre impecable. Digamos que son una “guardia civil de tráfico” muy elegante… y temida: cuando ellos te paran, hay multa, sin escapatoria ni discusión posible).

Ea, que al abrir la iglesia, la 5ta Avda. era todo un poema…

Hoy ya están trabajando en la reconstrucción…

Al final de la mañana vino el P. Luis, con la bici. Viene desde Habana vieja, y tarda algo menos de la media hora… casi 15 km. Llega sofocado… “¿no hay algo para refrescarme y reponer sales…?” Eso significa que quiere una cerveza, además de agua fresca… Alguien le ha contado lo buena que es la cerveza… (parece ser que es cierto). Y ya que estaba por aquí, justo unos minutos antes de la hora de almorzar… ¿Te quedas a comer? Resumiendo, que tenía hambre… y no quedó nada para la cena… Así que Fr. Carlito improvisó unos huevos fritos con… cosas… (alguna tajada de pollo que había sobrado, algo de un embutido que aquí se llama “jamonada”, que se parece a… no sé. La cosa es que estaba bueno… De todas formas, se agradecen las visitas.